La esquiadora francesa Juliette Willmann ha subido al podio en dos ocasiones en el Freeride World Tour y ha realizado una intensa temporada, clasificándose para la final de Verbier y terminando cuarta en la general. A continuación, repasamos las cuatro pruebas en las que participó el esquiador francés.
Tras un séptimo puesto en la general de la temporada pasada, Juliette Willmann ha conseguido este año el cuarto puesto en la jerarquía mundial. En el Freeride World Tour, la francesa terminó al pie del podio, detrás de la campeona mundial suiza Elisabeth Gerritzen, la noruega Hedvig Wessel y la polaca Zuzanna Witych. En una temporada de nuevo afectada por la epidemia y acortada a cuatro pruebas, incluida la final de Verbier, el embajador de Private Sport Shop comenzó el año de forma perfecta en la doble etapa de Arcalis, en Andorra.
Juliette Willmann siempre ha vivido en un mundo en el que los esquís estaban omnipresentes, ya que su padre era entrenador y su madre profesora de esquí. Firmó su primer podio en el Freeride World Tour en Andorra al final de una carrera limpia y comprometida (vídeo abajo) y sólo fue superada por Hedvig Wessel en esta etapa inaugural.
Una semana más tarde, en la segunda etapa, de nuevo en Arcalis, la esquiadora de Barcelonette lo volvió a hacer, logrando el segundo puesto en una carrera ganada por la mujer que se coronaría campeona del mundo al final de la temporada, Elisabeth Gerritzen. "La nieve era exigente", explicó tras su carrera. "Pero no ha sido fácil salir en última posición después de ver pasar a todos los demás esquiadores desde arriba. Tras abandonar Andorra con el maillot amarillo de líder de la disciplina, la francesa cumplió su primer objetivo de la temporada: subir varias veces al podio. Así pudo aspirar a algo más que a clasificarse para la final de Verbier (los seis primeros clasificados se clasifican para la final). Pero al final, el título se le resistió en Austria y Suiza.
Celebrada a mediados de marzo, la prueba de Fieberbrunn fue decisiva para los riders del Freeride World Tour en su intento de clasificarse para la Verbier Xtreme. El objetivo de Juliette de conocer Suiza se cumplió, pero su quinto puesto en Austria le dejó un sabor amargo. "Mal viaje, malas sensaciones...".
En el mítico evento de VerbierLa ex esquiadora alpina (compitió en la disciplina durante 10 años) aún podía aspirar al título mundial. Tras llegar a Verbier en segunda posición de la general, a 2.000 puntos de Hedvig Wessel, la francesa lo dio todo en la final con el objetivo de "no arrepentirse de nada", como explicó unos días antes de enfrentarse al famoso Bec des Rosses. Una cara que Juliette respeta por encima de todo: "Es la meca de nuestra disciplina. Es un poco un mito y una leyenda. Cuando tienes que correr aquí, te dices: '¡Voy a correr la Verbier Xtreme! Tengo que acostumbrarme. Puede resultar complicado si te dejas llevar por el estrés, puedes quedar atrapado rápidamente en todo ello. Hay un aspecto psicológico importante que dominar, pero me encanta esta cara".
Si bien la francesa se dejó llevar por los caballos en la final, su toma de riesgos no dio resultado y un pequeño error al final de la carrera la hizo caer. Bajó sola con dificultad hasta la zona de meta y su grito de dolor una vez terminada su carrera nos hizo temer lo peor sobre su lesión. Pero los exámenes en el hospital fueron finalmente tranquilizadores. Nada roto para Juliette, que termina el año en el cuarto puesto de la general. Volverá a participar en el Freeride World Tour 2022.