Entre dos montañas, dos edificios o dos campanarios, crea nuevos caminos encaramado y explora el arte del vacío a su manera: paso a paso, haciendo equilibrios sobre un alambre...
A sus 28 años, Nathan Paulin ya ha escrito unas cuantas páginas en la historia del highlining y sigue superando los límites de esta práctica, que combina rendimiento deportivo y estética artística. El pasado mes de mayo, el montañés de Savoie añadió un nuevo récord a su palmarés con la travesía de 2.240 metros del Mont-Saint-Michel. Deportista y artista, también figura en el cartel del espectáculo Cuerpos extremos, dirigida por el coreógrafo de renombre internacional Rachid Ouramdane. Un breve viaje con este equilibrista al aire libre.